La candidata a diputada nacional de Juntos por el Cambio en la Ciudad María Eugenia Vidal consideró hoy que el Gobierno respondió a la derrota en las PASO con «parches y manotazos de ahogado» y afirmó que «no lee en profundidad» el resultado electoral y el mensaje de la población.
«Pasaron 15 días y no aparece la escucha sobre el voto y hasta parece cierta indiferencia. Al Gobierno se le pidió un plan, un rumbo, no parches, no manotazos de ahogado y mucho menos peleas de poder entre ellos echándose la culpa para ver quién tiene que hacer cargo de la derrota en lugar de quién va a hacerse cargo de los problemas», sostuvo la ex gobernadora bonaerense.
En declaraciones radiales, la referente del PRO se refirió a los casos de intendentes que encabezaron actos para repartir electrodomésticos y remarcó que «están subestimando a la gente».
«El voto no se trata sólo de una cuestión de plata en el bolsillo. Ahí el Gobierno se equivoca y no lee en profundidad lo que pasó el último año y medio», señaló.
Asimismo, Vidal cuestionó las medidas que adoptó el Gobierno para flexibilizar restricciones: «Son improvisaciones que hasta lo pueden poner en riesgo. Teníamos que hacer fila distanciada para ir a votar y a la semana abren los boliches, podemos ir a ver fútbol y sacarnos los barbijos».
«Todo esto la sensación que da es de improvisación, falta de plan y hasta cierto miedo de en qué manos estamos», agregó la postulante a diputada nacional.
Al ser consultada sobre las modificaciones que hubo en el Gabinete del presidente Alberto Fernández con la inclusión del tucumano Juan Manzur y el quilmeño Aníbal Fernández, más el corrimiento de Santiago Cafiero, manifestó: «Cuando los argentinos con su voto pidieron un cambio de rumbo, el Gobierno volvió a lo peor de su pasado: pusieron a un jefe de Gabinete acusado de ocultar estadísticas de mortalidad infantil, a un ministro de Seguridad que dijo que la inseguridad era una sensación y que teníamos menos pobres que Alemania y un canciller sin ninguna experiencia en política internacional».
Ante ello, Vidal acusó al Frente de Todos de ser «una coalición política que no tiene plan» y concluyó: «Les importa un proyecto de poder, no de país».