La observación del cielo y de las estrellas forman parte desde hace más de seis años de las actividades destinadas a turistas y vecinos del denominado Astroturismo, y una de ellas se lleva a cabo en un cerro ubicado en cercanías de la localidad de Sierra de la Ventana, en el partido bonaerense de Tornquist.
La actividad a cargo del guía de turismo, Pablo Parotti, se realiza en el cerro Ceferino y también conocido como cerro del Amor con una elevación de 320 metros sobre el nivel del mar en Villa Arcadia, frente al balneario el Dique.
Al mismo se accede mediante una pequeña caminata de bajo esfuerzo hasta llega a la cima donde se puede disfrutar de una hermosa vista panorámica de la localidad de Sierra de la Ventana y del sistema serrano.
«Hace seis años que se lanzó la actividad y cada vez fue creciendo más y mejorando», señaló a Télam Parotti al comentar que «los cielos están en todos lados y acá en Sierra de la Ventana tenemos la posibilidad de hacerlo porque las luces que serían el factor importante son bajas y tenemos un cielo estrellado».
«Sierra de la Ventana nos da la posibilidad de tener herramientas naturales cerca de los espacios» dijo al indicar que «lo que hacemos nosotros es nuclear gente en un espacio, nos encontramos con los autos y nos movemos en caravana hasta la base de un cerro».
El cerro del Amor o Ceferino cuenta con un lugar para que se puedan estacionar los vehículos y desde allí los turistas juntos con el guía suben por un sendero de baja dificultad hasta la base.
«La actividad depende de la época del año, entre las 19 y las 22, con los tiempos de luz obviamente en verano se extiende mucho más pero en invierno es oscuro y lo hacemos lunes, miércoles, viernes y sábados», comentó.
Parotti quien trabaja como guía de turismo hace más de 18 años dijo que «la charla comienza abajo en la zona baja donde se cuenta un poco sobre la luminaria pública, por lo que hacemos un pequeño ascenso y posicionarnos por arriba del alumbrado donde se mejora mucho la visión y al estar en la oscuridad favorece la dilatación de pupilas y ocular».
«La experiencia se hace a simple vista a pesar que cuento con un telescopio que tiene sentido en la visión de la Luna», comentó al señalar que «contamos con otros implementos como anteojos de realidad virtual utilizado con un programa que es una caminata por la Luna».
Según el guía la actividad no dura nunca menos de una hora, pero «depende del cielo, el día y las condiciones climáticas» porque «los mejores cielos se ven con clima frío en el invierno».
«En pleno invierno si el cielo está sin nubes se ve perfectamente, es muy claro pero conlleva a bajas temperaturas por lo que estar parados arriba y por mucho tiempo por lo cual la continuamos en una posición más baja al reparo y terminamos con la actividad», sostuvo.
El guía remarcó que con un laser astronómico «uno apunta lo que quiere mostrar en el cielo, entonces vamos trabajando con las constelaciones y con las estrellas».
Así, indicó, se puede observar la constelación Cruz del Sur «además de Canopus y Antares, en un espacio muy atractivo después de hacer un pequeño tracking nocturno».
«Lo que también llama la atención es ver Sierra de la Ventana desde arriba iluminado que cambia totalmente la perspectiva», agregó.
También comentó que en el caso de los chicos y chicas utilizan linternas pero en general lo que más llevan son los teléfonos celulares.
«Ahora lo del Astroturismo se está empezando a conocer y tiene que ver con la explosión de la actividad en otros lados, hoy está tomando un protagonismo muy interesante a nivel nacional porque cielo tenemos todos lados entonces es encontrarle el espacio, la forma de nuclear, capacitarse y hacer la actividad de la manera mas amena posible», puntualizó.