En los últimos meses, los indicadores económicos en Argentina comenzaron a revelar una tendencia esperanzadora: el regreso de la confianza en el crédito. Esta recuperación, sustentada por datos recientes del Banco Central de la República Argentina (BCRA) refleja un cambio en los hábitos financieros así como una señal más amplia de estabilización económica y financiera. Este renacer de la confianza importa, y mucho, porque es una de las piezas clave para reactivar la economía y construir un futuro más previsible.
Según el BCRA, durante diciembre de 2024 los créditos hipotecarios lideraron el crecimiento del financiamiento, con un aumento mensual del 16,1% a precios constantes, acumulando un crecimiento anual del 36% en términos reales tras haber caído un 52% el año anterior. De manera similar, los préstamos prendarios experimentaron un incremento del 57,6% anual, impulsados por la recuperación en las ventas de autos y motos. Los créditos comerciales también registraron un crecimiento destacado, con un alza interanual del 53,7%, completando 11 meses consecutivos de aumento. El caso más notable, sin embargo, fue el de los préstamos personales, que crecieron un 144,1% interanual, consolidándose como la línea crediticia de mejor desempeño en el año.
El avance del crédito también encuentra respaldo en otros indicadores de confianza. Por ejemplo, la última edición del índice de confianza empresaria de Vistage alcanzó 113 puntos en el tercer trimestre de 2024, su nivel más alto en cuatro años, con un 80% de los encuestados proyectando mejoras en la economía para 2025. Este optimismo empresarial está alineado con el pronóstico del Banco Mundial, que estima un crecimiento del PBI argentino del 5% para este año, impulsado por sectores como la energía, agricultura y minería. Además, crecieron los depósitos en moneda extranjera, tal como destacan desde el BCRA, reflejando una mayor confianza en la gestión económica actual.
A nivel de las pequeñas y medianas empresas (pymes), la confianza también está en alza. Según la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la confianza de los empresarios del sector creció un 4,9% interanual según la última edición de su índice (en agosto de 2024), completando nueve meses consecutivos de mejora. Aunque persisten desafíos, como el aumento de costos, este sector está recuperando su dinamismo, clave para la reactivación del empleo y la inversión.
Este contexto de creciente confianza en el crédito y en la economía tiene implicancias profundas. El acceso al financiamiento es un motor importantísimo para la inversión y el consumo, dos pilares esenciales para sostener el crecimiento económico. Además, esta dinámica refuerza un círculo virtuoso: a medida que los actores económicos perciben estabilidad, se incrementan los depósitos, las inversiones y las oportunidades de crecimiento.
En este panorama, plataformas como Alprestamo juegan un rol estratégico. Al facilitar el acceso al crédito y conectar a los usuarios con opciones adaptadas a sus necesidades, estamos contribuyendo a transformar la manera en que los argentinos acceden a financiamiento. A través de nuestra tecnología y un proceso 100% digital, ayudamos a que miles de argentinos encuentren soluciones financieras de manera rápida y transparente. Estamos convencidos de que este tipo de soluciones empoderan a las personas y las empresas, así como también fortalecen el ecosistema financiero, consolidando las bases para una economía más inclusiva y resiliente.
La confianza en el crédito está regresando en Argentina, y es un cambio que importa. No se trata solo de cifras, sino de un cambio en la percepción y las posibilidades. La confianza en el crédito está regresando en Argentina, y es un cambio que importa. No se trata solo de cifras, sino de un cambio en la percepción y las posibilidades que, desde Alprestamo, nos comprometemos a seguir impulsando día a día.