El detenido por el femicidio de Magalí Gómez ocurrido en el partido bonaerense de Tigre se negó a declarar hoy ante el fiscal del caso, mientras que se supo que la autopsia reveló que la víctima fue estrangulada.
Según confirmaron fuentes policiales a NA, el fiscal Pablo Menteguiaga, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Violencia de Género de Tigre, indagó al acusado, Agustín Iván Pérez, de 38 años, quien está acusado por el delito de homicidio doblemente agravado por la relación de pareja y por haber sido cometido mediando violencia de género, pero se negó a declarar.
Además, hoy se supo que la operación de autopsia determinó que la joven de 27 años fue estrangulada y que la mataron durante la madrugada del lunes en su casa y luego habría sido arrojada en 25 de Mayo y Las Violetas, en el Barrio La Paloma, donde fue encontrada sin vida.
Pérez le habría confesado a la Policía que la mató en el auto en el momento en el que la llevaba al trabajo, pero dicha autoincriminación no tiene validez judicial.
Sin embargo, una de las pruebas que compromete a Pérez es uno de los videos de una cámara de seguridad ubicada a pocos metros del lugar donde fue encontrado el cuerpo, en el que se ve el Fiat Siena de color azul de la víctima a las 6:58 del lunes.
En tanto, otra de las pruebas en su contra son los arañazos que el principal sospechoso presentaba a simple vista en el cuello y en la cabeza.
La víctima presentaba en sus brazos algunas lesiones de defensa, y se mandó a analizar material genético que tenía en las uñas de sus manos.
Este martes, y en declaraciones a la prensa, Marta Castillo, la madre de la víctima, dijo que el acusado «era un manipulador y violento», y que su hija quería «dejar la relación».
«Nunca lo aceptamos. El primer año que estaban en pareja ya le pegaba. Era muy manipulador», dijo la madre de Magalí, y agregó: «Nunca pensé que iba a hacer esto. Para mí quiso tener relaciones con ella y se negó, por eso la mató».