Más de 500 kilos de cocaína fueron secuestrados cuando eran transportados en un falso piso de un camión grúa, durante un control realizado por Gendarmería Nacional en la ruta 34, cerca de la ciudad de Orán, en Salta.
El procedimiento, uno de los más importantes en cuanto a esa droga, fue realizado ayer por efectivos del Escuadrón 54 de la fuerza, «Aguaray», en el pasaje Piquirenda y culminó con el chofer del transporte detenido, mientras que otro supuesto cómplice logró escapar.
Según informaron fuentes de la fuerza, todo se inició cuando los gendarmes notaron que un camión grúa, tipo plancha, realizó una maniobra brusca con la intención de eludir el control.
Cuando los efectivos se acercaron al vehículo, el conductor del mismo alegó que tenía un problema mecánico.
Al mismo tiempo, los gendarmes intentaron interpelar a un transeúnte, pero éste escapó, tras arrojar un arma al suelo, por lo que se supone que actuaba en el rol de «campana».
Los uniformados, frente a testigos, efectuaron el registro del rodado, con la asistencia del perro detector de narcóticos «Tedy», quien reaccionó como lo hace habitualmente ante la presencia de estupefacientes, al pasar por el sector de la plancha.
Tras realizar el comunicado pertinente con la Fiscalía Descentralizada de Orán, los gendarmes trasladaron la grúa a su base, donde se realizaron los trabajos pertinentes para descubrir en un doble fondo la presencia de 480 paquetes rectangulares con la sustancia de color blanco.
Integrantes de Criminalística y Estudios Forenses llevaron a cabo las pruebas de campo Narcotest, las cuales arrojaron resultado positivo para cocaína. Arrojando un peso total de 504 kilos, con 380 gramos.
La Fiscalía interviniente dispuso la detención del conductor de la grúa, un hombre de nacionalidad argentina, además del decomiso de la droga, además de pericias en el arma arrojada por el prófugo.