Un empleado del Departamento Judicial de San Isidro se atrincheró ayer durante unas tres horas con un arma y con su hija en un departamento del barrio porteño de Nuñez, amenazó con suicidarse, pero finalmente fue reducido por la Policía.
Según confirmaron fuentes policiales a NA, el hombre de 40 años le había escrito esta mañana un mensaje a su jefe, el fiscal de Ejecución Penal de San Isidro, Marcos Petersen Victorica, a quien le había dicho por Facebook que le agradecía «por todo, y que terminaría con su vida».
Tras recibir ese mensaje, Petersen Victorica concurrió al domicilio del hombre pero este se negó a abrirle y mantuvieron una conversación a través de la puerta, por lo cual se hizo la denuncia.
Unos minutos más tarde, efectivos de la Comisaría Vecinal 13 A de la Policía de la Ciudad y personal de negociación y psicólogos llegaron al edificio ubicado en Congreso al 2.100 y comenzaron a dialogar con el hombre. .
Tras unas tres horas de conversación con el negociador del grupo Delta del DOEM, el hombre depuso su actitud y la Policía pudo ingresar al departamento.
En el lugar trabajó también personal del SAME, de Bomberos de la Ciudad y de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Número 12.
Las fuentes indicaron que el negociador del DOEM pudo entablar comunicación con la ex novia del hombre, quien indicó que el mismo tiene antecedentes psiquiátricos y que se encontraba solo en el interior del departamento con su hija de 22 años.
Además, la mujer contó que él le había dicho que no dejaba salir a su hija porque la Policía había ido a buscarla porque creen que es terrorista.
Tras ser rescatado, el hombre y su hija fueron derivados al Hospital Pirovano bajo contención psiquiátrica, según confirmó el titular del SAME, Alberto Crescenti, quien además informó que nadie resultó herido durante el operativo.