El presidente del Comité Nacional de la UCR, Gerardo Morales, cruzó a la líder de la Coalición Cívica-ARI, Elisa Carrió, y subrayó que «hay que consolidar Juntos por el Cambio como alternativa para el país, no dividirlo».
Luego de que la ex diputada nacional señalara que dentro de la alianza opositora «faltan fijar las reglas de la decencia», el gobernador de Jujuy rechazó sus dichos y afirmó que «no vale todo».
«No vale todo, Elisa Carrió. Es de una gran irresponsabilidad tu actitud insultante hacia mí como gobernador. Si hay alguien al que le tocó enfrentar a la mafia y que no negocia impunidad, soy yo», sostuvo el mandatario norteño.
A través de su cuenta de Twitter, el ex senador nacional contestó a la chaqueña, quien había avivado la interna de Juntos por el Cambio con fuertes declaraciones: «Tiene que tener reglas decentes, no pueden tener más negocios. Le dije a Mauricio Macri que yo estoy harta de que haya doble juego, y voy a hablar», lanzó Lilita en diálogo con LN+.
Ante ello, Gerardo Morales destacó que «en Jujuy hay 43 empresas, la mayoría de prestigio internacional, invirtiendo en litio con leyes y un código minero que se cumple».
«Apenas asumí como gobernador transparenté los padrones mineros para que se conozcan todas las áreas. No permito que se intente manchar nuestra gestión», señaló.
Y subrayó: «Hay que consolidar Juntos por el Cambio como alternativa para el país, no dividirlo. Los adversarios que están destruyendo las esperanzas del pueblo argentino están en el Frente de Todos».
Previo a los tuits del jujeño, la presidente del Consejo Nacional del PRO, Patricia Bullrich, había utilizado el mismo medio para rechazar los dichos de la líder de la Coalición Cívica- ARI.
«Aunque no siempre coincida con ellos en sus posiciones, no aceptaré el insulto a nuestros dirigentes, ni a otros que conforman nuestra coalición. No vale todo. No vale eso de que ´porque es Carrió nadie la enfrenta´», había publicado la ex ministra de Seguridad.
Y había añadido: «Como presidenta del PRO digo basta y no me callo. La unidad es la herramienta más potente contra el kirchnerismo. Quien atente contra ella pone en riesgo la construcción del cambio que sueñan millones de argentinos».