La secretaria de Energía, Flavia Royón, aseguró esta noche que «las familias de menores ingresos no van a sufrir la suba de tarifas», al tiempo que negó que se trate de un aumento de precios, sino de «una readecuación de los servicios», porque pensaron «en un sistema más justo».
«Pensamos un sistema de tarifas justas. Las medidas siguen el plan de Sergio Massa y buscan traer orden fiscal», indicó Royón, que negó que estén previstos nuevos aumentos para los próximos tres trimestres.
Proyectó que para el año próximo «el costo de energía va a tender a bajar», a partir de una «reducción en la importación».
Asimismo, sostuvo que «quienes pueden pagar tarifa plena lo hagan, pero el Estado va a seguir acompañando a quien lo necesite».
«Es injusto que el subsidio sea indiscriminado», afirmó la flamante funcionaria nacional en declaraciones al canal Todo Noticias (TN).
«Se retira el 20 por ciento de subsidios en los comercios sobre unos 1.000 kilovatios por mes, durante esta primera etapa. El ajuste será de unos 2.000 pesos. Además, estamos contemplando excepciones como comedores, pero no edificios», precisó Royón y agregó que «hay cuatro millones de familias que no pidieron subsidios».
También aclaró que «el segmento de pymes en el gas no va a sufrir aumentos», pero «en energía eléctrica, sí».
La funcionaria habló tras el anuncio sobre la quita progresiva de subsidios que definió el ministro de Economía Massa, por el cual se prevé un ahorro fiscal de 455.000 millones de pesos en 2023 y de 47.500 millones de pesos para este año.
Para energía eléctrica, el tope de subsidio se fijó en 400 kilovatios mensuales por hogar y la tarifa plena se pagará por el incremental, es decir por el consumo que exceda ese límite.
Para los hogares que no cuenten con servicio por red, ese tope se eleva a 550 kilovatios por mes, mientras que el sistema elegido para el gas natural por redes será similar, aunque la complejidad por zona y características climáticas llevó a las autoridades a establecer promedios ponderados sobre los límites máximos y mínimos de cada categoría de usuario.
En tanto, la quita de subsidios del agua apunta a una quita gradual por zonas.
«Es una tarea desafiante, hay mucho nerviosismo y mucha incertidumbre con respecto a las tarifas, que no es fácil de explicar. En 2019 sobre el salario promedio el gasto energético representaba el 5,3 por ciento hoy va a representar el 2,5 por ciento», detalló la secretaria de Energía.
Royón indicó que «el 80 por ciento de las familias argentinas consume menos de 400 kilovatios hora y el promedio es de 250 por mes».
«En un período de seis meses se eliminan los subsidios.
Buscamos que cada familia comience a tener conciencia de cuidar la energía, que es un bien preciado», añadió.
Por otra parte, reveló que no tuvo «la oportunidad de conversar con Cristina Kirchner», pero indicó que «esta es una medida que impulsa el ministro Sergio Massa», que según entiende «tiene el aval» de la Vicepresidenta.
«Se estimaba que solo el 10 por ciento no iba a solicitar el subsidio y hoy tenemos un universo mayor. Originalmente no se había planteado la quita del subsidio para los generales, que no son industriales ni residenciales. En gas para el segmento de pymes no se va a retirar el subsidios. Los que tengan ingresos inferiores a 109.000 pesos no van a sufrir aumentos», señaló.
Por último, instó a los jubilados a que soliciten «que se les mantenga el subsidio», al tiempo que consideró que «los aumentos de esta primera etapa son montos que se pueden afrontar».