El presidente Alberto Fernández arribó a la ciudad indonesia de Bali para participar de la cumbre del G20 y mantener varias reuniones bilaterales, tras su paso por París.
A pesar de haber transitado un vuelo de unas 15 horas, en el entorno del jefe de Estado señalan que respeta a rajatabla la dieta que inició y que lo hizo perder 10 kilos: a bordo de la aeronave que lo trajo al sudeste asiático comió pescado con verduras.
Una vez en tierra, el mandatario fue recibido por el calor fulminante de Indonesia, con temperaturas que superan los 31°: su estadía en la paradisíaca isla de Bali configura el último tramo de su gira internacional, que inició el pasado 10 en París.
Repleto de verde y vegetación, las autoridades locales aguardan la llegada de cada jefe de delegación con un baile típico.
En el Aeropuerto Depansar Ngurah Rai lo esperaban el ministro de Turismo y Economía Creativa de Indonesia, Sandiaga Uno, y el director general de Información y Diplomacia Pública, Teuku Faizasyah.
Su agenda programada es extensa y diversa. Si bien el lunes su única actividad consiste en participar de la cena que organiza su par galo, Emmanuel Macron, con jefes de Estado de África, Europa y Asia, el martes afrontará un día de varios compromisos.
El inicio de la Cumbre del G20 será el 15 de noviembre, y lo tendrá al argentino como expositor en dos de los paneles centrales.
El mandatario estará presente en la apertura de la Cumbre, donde expondrá en el Panel sobre Seguridad Alimentaria y Energética, uno de los debates centrales para luego participar de un almuerzo entre jefes de Estado. Por la tarde, tomará la palabra en la sesión plenaria dedicada a cuestiones vinculadas a la salud.
A su término, en agenda tiene el Evento de Asociación para la Infraestructura y la Inversión Global organizado por Joseph Biden, al que asistirá como único latinoamericano invitado. El conclave persigue como objetivo la intención de debatir el futuro del ya anunciado fondo de infraestructura lanzado por Estados Unidos y que acumula una cifra de USD 650.000 millones a ser distribuida. .
En medio del cronograma del G20, Alberto Fernández logró colar una serie de encuentros claves en el mapa geopolítico. El mismo martes se verá a solas con su par chino, Xi Jinping, una de las primeras bilaterales en confirmarse, con el objetivo de abordar un tema central en la relación comercial entre ambas naciones: la ampliación y la especificación de los usos del swap.
Si bien en marzo del corriente año, Xi aprobó y Alberto Fernández anunció la ampliación, la Argentina apostará a que eso logre efectivizarse.
Para el miércoles 16 se realizará la foto de familia, y durante el mediodía (1 de la madrugada en la Argentina), se verá con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, para reiterar su pedido de revisión de las sobretasas a los países que contrajeron deuda por encima del número que debían desde una perspectiva global. No es la primera vez que hablan del tema, ni la última en la que la titular de la entidad se comprometerá a atender el pedido.
Luego mantendrá un intercambio con el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard. .
En estudio están también bilaterales con el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán; el canciller federal de Alemania, Olaf Scholz; y el primer ministro de Japón, Fumio Kishida.
Por último, el Presidente celebrará además el 50 aniversario del regreso del General Perón a la Argentina junto a su par de España, Pedro Sánchez.
La delegación que lo acompaña está compuesta por el canciller, Santiago Cafiero; el ministro de Economía, Sergio Massa; el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos; el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello y la portavoz Gabriela Cerruti.