ElApolo del Belvedere, obra maestra de la escultura clásica, volvió a estar visible en los Museos Vaticanos tras una delicada restauración de cinco años, con una mano nueva y «apoyada» en un innovador mástil metálico que garantizará su estabilidad en el futuro.
«Es un día de fiesta para los Museos Vaticanos porque finalmente volvemos a exponer al público un icono de belleza, una de nuestras obras maestras», celebró la directora de esta institución pontificia, Barbara Jatta.
La restauración duró cinco años, pues se vio ralentizada por la pandemia, y además de estudiar el estado de esta frágil obra, permitió cambiarle una mano y reforzarla de pie con un mástil.
Jatta apuntó que todos los cambios efectuados “son reversibles”. «No hemos alterado la estatua ni hemos hecho un agujero más en ella, sino que la hemos respetado para ofrecérsela a las generaciones actuales y futuras del mejor modo», aseguró.
fuente NA