Tras los cruces con Bogotá por la represión a las manifestaciones que sacudieron a Colombia en los últimos días, el presidente Alberto Fernández designó al embajador que se hará cargo de conducir el vínculo bilateral con el Gobierno de Iván Duque.
A través del Decreto 313/2021, el jefe de Estado puso al frente de la sede diplomática en Bogotá a Gustavo Alejandro Dzugala.
El flamante representante ante Colombia se desempeñaba como subsecretario de Política Exterior y anteriormente se había desempeñado como director general de Asuntos Consulares.
Además, Dzugala estuvo varios años como embajador en África, donde debió representar a la Argentina ante naciones como Nigeria, Camerún, Costa de Marfil, Gabón, Ghana y Sierra Leona.
El decreto lleva las firmas de Alberto Fernández; del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y el canciller, Felipe Solá.
La designación de Dzugala como embajador en Bogotá se da luego del cruce que mantuvieron el presidente Alberto Fernández con el Gobierno de Iván Duque, luego de que el mandatario argentino cuestionara el accionar de las Fuerzas de Seguridad en la represión de las manifestaciones que sacuden a Colombia.
A través de su cuenta de Twitter, el jefe de Estado manifestó en la noche del pasado jueves que observaba «con preocupación la represión desatada ante las protestas sociales ocurridas en Colombia».
«Ruego porque el pueblo colombiano retome la paz social e insto a su gobierno a que, en resguardo de los derechos humanos, cese la singular violencia institucional que se ha ejercido», subrayó el mandatario.
Ante el planteo del mandatario por el conflicto social y el duro accionar de las Fuerzas de Seguridad en el país cafetero, el Gobierno colombiano salió a responderle y a cuestionar su «intromisión» en asuntos de la política doméstica.
«Cancillería, en nombre del Gobierno de Colombia, rechaza firmemente las declaraciones del presidente Alberto Fernández, que desconocen que miles de colombianos han tenido, conforme a nuestro Estado de Derecho, todas las garantías para ejercer la protesta pacífica a lo largo y ancho del país», señaló un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de la nación gobernada por Iván Duque.
Desde Bogotá, la cartera diplomática colombiana remarcó que el Gobierno de ese país «ha convocado y adelanta diálogos con todos los sectores del país». «La institucionalidad democrática colombiana protege los derechos constitucionales de los colombianos y no será desprestigiada por este tipo de pronunciamientos que, además de ser una intromisión arbitraria, buscan alimentar la polarización que no contribuye a la convivencia y al consenso», lanzó el Palacio de San Carlos. .
El intento del Gobierno de Duque de llevar adelante una reforma tributaria generó un importante rechazo en el pueblo colombiano, que salió a las calles durante varios días consecutivos. Las manifestaciones fueron reprimidas por las Fuerzas de Seguridad: al menos 26 personas murieron por el accionar oficial. Las imágenes de los enfrentamientos dieron vuelta al mundo y generaron el rechazo de miles de personas, entre las que se contó el mandatario argentino.