El analista económico Damián Di Pace consideró hoy que la elevada inflación que tiene la Argentina está vincuada con «una emisión monetaria que está actuando con rezago».
«El 4,1% de inflación de abril es más de lo mismo. El Gobierno intenta controlarla con una batería enorme de programas, como Precios Cuidados, Precios Máximos, Ley de Góndolas, entre otros. Pero no se está entendiendo que el fenómeno de la inflación en la Argentina termina siendo una emisión monetaria que está actuando con rezago», evaluó.
Di Pace señaló que, además, «hay una inflación de costos que estaba retenida y, al haber un poquito más de actividad económica, empezó a levantarse».
En declaraciones al programa «Esta mañana», que conduce Luis Majul y se emite por radio Rivadavia, el analista indicó también que «hay dos influencias importantes» con respecto a la inflación.
Una de ellas, dijo, es la evolución del precio de los commodities: «por eso, los alimentos están en 4,3%, por encima de la inflación general. Y también hay limitaciones para importar», evaluó.
Asimismo, puso como ejemplo lo que sucede en los Estados Unidos: «en ese país hubo una emisión monetario monumental por la pandemia, tanto el año pasado como éste. Y en doce meses, la inflación pasó del 0,8% al 4,2%».
«Eso muestra claramente lo fuerte que la emisión impacta en la inflación», enfatizó Di Pace.
Según informó el INDEC, la inflación fue del 4,1% en abril y acumuló 17,6% en el primer cuatrimestre del año, impulsada por fuertes subas en indumentaria, transporte y alimentos.
En los últimos doce meses, el costo de vida fue del 46,3%, de acuerdo con los datos oficiales.
La suba del primer cuatrimestre fue la más alta en cinco años, tras el 16,2% que había mostrado en 2016 para el mismo período.
Los mayores aumentos correspondieron a prendas de vestir, con el 6% y transporte, 5,7%.
También siguió siendo alto el incremento en el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas, que se ubicó por encima del nivel general, con 4,3%.
Si se proyectan los datos del primer cuatrimestre a todo el año, la inflación rozaría el 53%, más del doble de lo proyectado en el Presupuesto Nacional de 2021, que es del 29%.