La producción petrolera en el yacimiento de Vaca Muerta marcó en mayo un nuevo récord al trepar a 148.069 barriles diarios, con lo que recuperó por primera vez el valor previo a la pandemia iniciada en marzo del 2020, según un informe privado.
Una situación idéntica ocurrió con la producción de gas que alcanzó los 32.310 metros cúbicos diarios, equivalente al 27% del total del país, recuperando también los niveles prepandémicos.
«Como viene sucediendo desde septiembre 2020, durante mayo se rompió nuevamente el récord histórico de producción petrolera con un valor de 148.069 barriles diarios, un 29% del total nacional», señaló en un informe la consultora RICSA (Regional Investment Consulting).
Según el informe, en marzo del 2020, la producción de petróleo estuvo en su valor máximo de los últimos años con una producción de 528.782 barriles diarios, pero el impacto de la pandemia golpeó llegando a un mínimo histórico alcanzado en mayo del 2020 con la suma de 454.755 barriles diarios.
«Un año después, durante mayo 2021, la producción de petróleo alcanzó los 512.485 barriles diarios, un 12,7% superior con respecto a mayo 2020, y a solamente un 3% de recuperar la producción pre pandémica», añadió.
El relevamiento señaló que «tanto en la producción petrolera como gasífera del país, Vaca Muerta es el área de mayor peso» y añadió que «como viene sucediendo desde septiembre 2020, durante mayo rompió nuevamente el récord histórico».
Del total de lo producido de petróleo durante mayo pasado, el 79% fue no convencional, mientras que en el caso de la producción de gas fue del 71%.
Según la proyección realizada por la provincia, la producción de petróleo en Vaca Muerta podría crecer este año un 40% respecto de 2020, hasta alcanzar unos 230.000 barriles diarios de crudo, lo cual habilitará la posibilidad de saldos exportables.
Durante abril, la actividad en el yacimiento de Vaca Muerta estuvo seriamente afectada por las protestas y bloqueos de trabajadores de la salud que reclamaron mejoras salariales.
Según estimaciones provinciales, las protestas y manifestaciones llegaron a producir una pérdida diaria de 10 millones de dólares, además de haber generado graves inconvenientes en el abastecimiento de combustibles en toda la región.