Boca inició con una sonrisa el ciclo de Sebastián Battaglia como entrenador y cortó una larga sequía de victorias, al imponerse esta noche por 1 a 0 sobre Patronato, en la Bombonera, en un partido correspondiente a la séptima fecha de la Liga Profesional.
El juvenil Luis Vázquez, de cabeza, marcó el tanto de la victoria «xeneize», a los 39 minutos del segundo tiempo, asistido por un centro de Exequiel Zeballos.
La aparición goleadora de Vázquez terminó siendo un acierto del flamante director técnico, que dispuso jugar nuevamente con un centrodelantero en un esquema 4-3-3, algo que no venía ocurriendo bajo la conducción de Miguel Russo.
El conjunto de la Ribera, que tuvo un flojo primer tiempo y mejoró en el segundo, logró su primer triunfo del certamen, que le sirvió además para poner fin a la racha negativa de 10 partidos sin triunfos, algo que no ocurría desde 1957.
Boca sólo había ganado uno de los últimos 16 encuentros disputados y la última victoria había sido el 26 de mayo, cuando goleó 3 a 0 a The Strongest por la fase de grupos de la Copa Libertadores.
Cuando se jugaban 27 minutos del primer tiempo se produjo una acción polémica, ya que el árbitro Silvio Trucco no convalidó un gol convertido por Leandro Marín para la visita, a la salida de un tiro de esquina, por una supuesta falta sobre el arquero Agustín Rossi que no pareció tal.
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Buen primer tiempo de Patronato.
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El equipo dueño de casa buscó jugar plantado en campo contrario en el inicio, pero le costó profundizar y cambiar de ritmo frente a un rival que estuvo bien parado.
Incluso fue el «Patrón» el que más cerca estuvo en esos primeros 45 minutos, sacando provecho de algunos desacoples entre líneas mostrados por Boca.
Así ocurrió a los 26 minutos, cuando Patronato movió la pelota de izquierda a derecha para que Gabriel Gudiño, solo y sin marca, termine sacando un derechazo, bien tapado abajo por Rossi.
De ese tiro de esquina llegó la jugada polémica en la que Marín, un ex Boca, convirtió de derecha y Trucco no cobró el gol al considerar que hubo una infracción sobre el arquero boquense.
En los últimos minutos de la primera parte Boca se repitió con buenas subidas de los laterales, aunque los centros que lanzaron no tuvieron buen destino, y los intentos individuales de Cristian Pavón.
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Mejora de Boca en el complemento.
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Boca pareció salir con otra decisión en el segundo tiempo, se paró más adelante en el campo de juego y antes del minuto Pavón, de los mejores de la noche, estuvo cerca con un zurdazo cruzado, apenas desviado.
Con el correr de los minutos, Boca acentuó su dominio, pero le siguió faltando un poco más de velocidad en los pases para sorprender a un rival firme en defensa.
Jugados 22 minutos, la visita volvió a inquietar con un «venenoso» tiro libre de Gudiño, rasante y junto a un palo, que encontró bien parado a Rossi.
Promediando la etapa final, Battaglia movió el banco de suplentes buscando frescura en ataque y mandó al campo de juego a Aaron Molinas y Zeballos.
Las variantes surtieron efecto, ya que Molinas empezar a mover los hilos del equipo, mientras que el «Changuito» Zeballos se mostró punzante en ataque.
Incluso Molinas se animó a probar con un disparo de media distancia, a los 31 minutos, que salió apenas por sobre el travesaño.
Y cerca del final, a los 39, otra vez apareció Molinas para poner un pase profundo a espaldas de la defensa para la corrida de Zeballos, éste pisó el área, buscó a Vázquez y el 9, solo entre dos defensores, puso la cabeza para quebrar el marcador.
El gol del centrodelantero, que no lo gritó por su paso por el conjunto de Paraná, fue un verdadero desahogo para Boca tras los agitados días vividos en los últimos tiempos.
