El banco de inversión norteamericano Goldman Sachs consideró que la derrota electoral del oficialismo «debilitará» al Gobierno y le haría perder las elecciones presidenciales del 2023.
El documento, escrito por el analista Alberto Ramos, sostiene que el resultado electoral «probablemente debilite al mandatario local (Alberto Fernández) y a su ministro de Economía, Martín Guzmán, frente a la vicepresidenta Cristina Kirchner y sus socios más cercanos».
El analista pronosticó que ese debilitamiento por el resultado de las PASO probablemente le harán perder al Gobierno las próximas presidenciales, al señalar que la elección «deja la puerta abierta a un cambio de administración en 2023».
«El Gobierno tenía tres objetivos principales para las primarias. Parece haberse quedado corto en todos ellos», agrega el analista.
Recuerda que el objetivo electoral del Gobierno era ganar en la provincia de Buenos Aires, obtener una mayoría en la Cámara de Diputados, y retener la mayoría en el Senado.
«Las primarias se ven como un adelanto del resultado electoral real que llegará en dos meses», afirma el analista, tras señalar que la oposición «ganó en 17 de las 23 provincias y en la Ciudad de Buenos Aires».
Ramos minimizó el triunfo electoral del Gobierno en seis provincias, al explicar que «representan poco más del 10% de la lista electoral nacional».
Dos años atrás, en las elecciones presidenciales, el Gobierno de Alberto Fernández obtuvo el 48% de los votos y ganó en 19 de las 24 provincias», recordó el documento.
Según Ramos, «a corto plazo, existe el riesgo de un ligero cambio hacia políticas más heterodoxas, intervencionistas y populistas, en un intento por reconstruir el apoyo político».
«Pero las autoridades probablemente también sean conscientes de que un endurecimiento significativo de las políticas heterodoxas podría dañar aún más la economía y, por lo tanto, fracasar al momento de pagar dividendos políticos en 2023», indica.
Resalta el análisis que los votantes rechazaron «la combinación de políticas actuales o, al menos, sus resultados, como la inflación muy alta, crecimiento económico y salarial en declive, todo en medio de fuertes controles y una represión financiera sofocante».
Agrega que «es probable que el mercado tenga una visión positiva de las elecciones primarias, ya que aumentan la probabilidad de un cambio hacia 2023 y de controles y contrapesos más efectivos hasta entonces; esto mitigado por el riesgo de políticas a corto plazo más populistas».