El economista Carlos Melconian consideró que si la inflación bajara, el Gobierno estaría «en un problema», porque la utiliza para licuar el gasto público y «sobrellevar» la situación económica.
Para el ex presidente del Banco Nación, el Poder Ejecutivo «le da al sector público, o a los subsidios, un aumento, que es siempre inferior a la inflación, y con eso va ajustando».
«Al subir los precios, los impuestos que se pagan nominalmente suben. Entonces, si la inflación baja el Gobierno está en un problema», enfatizó.
Y explicó que, así, la inflación licúa el gasto público porque el Gobierno «no quiere pagar el costo de ajustarlo».
«Por más que diga otra cosa y presente un Presupuesto que sea cualquier cosa, el Gobierno necesita a la inflación para sobrellevar el ambiente», advirtió.
En ese sentido, insistió con que el crecimiento de la recaudación relacionado con el gasto que se licúa «hace que el financiamiento no explote por el aire».
«No es que el Gobierno está a favor de la clase pobre y no quiere ajustar. Tienen que ajustar todavía el zafarrancho que hicieron entre 2007 y 2015. Después, en el medio, está (Mauricio) Macri. El Gobierno se pone en la vereda solidaria y es mentira. No quieren ni siquiera arreglar el zafarrancho que dejaron en 2015», se quejó.
Melconian aseguró además -en declaraciones a un canal de noticias- que «no hay un riesgo de espiralización, gracias a que la inflación hace su trabajo de erosión».
Con relación a la situación económica, comentó que «hay sectores con algún récord de producción para llegar al estancamiento previo (a la pandemia), y otros que no han podido llegar».
En ese sentido, ejemplificó: «El cemento está en récord histórico, pero la producción de autos debe estar a un tercio de lo que solía estar».
«Es una recuperación asimétrica, ya que algunos sectores todavía están profundamente sumergidos. El Gobierno hace muchísimo más bombo de lo que es», indicó.
A su criterio, el repunte de la producción de algunos sectores hay que circunscribirlo a un «esquema de berretalandia».