Cerca de medio millón de puestos de trabajo se crearon en los Estados Unidos durante enero de este año, a pesar de la nueva ola de contagios por coronavirus, según se difundió oficialmente hoy.
La cifra es más del triple de lo que pronosticaban los analistas, que estimaban un crecimiento de alrededor de los 150.000 empleos.
El Departamento de Trabajo de ese país señaló que durante el primer mes del año, se crearon 467.000 empleos, una cifra superior a la esperada por el Gobierno.
El informe oficial reveló además que de ese total, la mayor creación de empleo se produjo en el ocio y la hotelería (151.000), seguida de los servicios profesionales (86.000).
En el comercio hubo 61.000 empleos más y el transporte aumentó en 54.000 puestos.
La tasa de población activa (el porcentaje de personas que tienen empleo o lo buscan) se elevó tres décimas en el primer mes del año, hasta el 62,2 %.
También en enero, el número de personas que trabajan a distancia a causa del virus aumentó hasta el 15,4%, y también creció la cantidad de desocupados durante menos de cinco semanas.
Los datos indican también que el número de adultos sin empleo apenas varió, situándose en 6,5 millones hasta enero.
A pesar del dato alentador de enero, Estados Unidos debería crear unos 2,9 millones de puestos de trabajo para volver a los niveles pre pandemia.
El pico de desempleo durante la pandemia se alcanzó en abril de 2020, cuando llegó a 14,8%.
También, la Oficina de Estadísticas Laborales revisó los datos de diciembre y aumentó fuertemente el cálculo de creación de empleo: 510.000 nuevos puestos de trabajo en el último mes de 2021, contra los 199.000 que había anunciado a principios de 2022.
En este marco, el economista Gabriel Caamaño señaló: «No es malo el dato de empleo en Estados Unidos de enero 2022. Subió mucho la participación, eso hizo que el desempleo suba algo, y siguió creciendo fuerte la tasa de empleo».
«Pero eso es bueno. De hecho el ritmo de creación de empleo no agrícola también fue muy superior a la previsión», añadió en su cuenta Twitter.
Según Caamaño: «Se especulaba mucho con el impacto de Ómicron sobre el ritmo de creación de empleo no agrícola. Este desaceleró, pero mucho más en el margen de lo que se esperaba. Siempre aclarar que son todos números provisorios».