Después de mucho tiempo Arsenal logró dar vuelta un partido al imponerse a Huracán por 2 a 1, al cabo de un aceptable encuentro disputado esta tarde en el estadio «Julio Humberto Grondona», válido por la tercera jornada de la zona 2 de la Liga Profesional.
Axel Werner, en contra de su propio arco, a los 18 minutos del primer tiempo, inauguró el marcador para el equipo de Parque de los Patricios, en tanto que Sebastián Lomónaco, a los 47 del mismo período a través de la ejecución de un tiro penal, niveló las acciones para el conjunto de Sarandí.
Ya en el complemento, Alexander Díaz a los 32 minutos, le dio la victoria final al dueño de casa.
Arsenal fue mucho más que su rival en todo el cotejo y venció con absoluta legitimidad a un «Globo» que nunca levantó vuelo y se «pinchó» por completo tras abrir el marcador.
Después de unos primeros minutos de estudio donde no se sacaron ventajas, Huracán llegó a la apertura tras un centro desde la derecha de Cristaldo y posterior cabezazo de Jonás Acevedo.
El balón impulsado por este último dio en el palo izquierdo y luego de rebotar en la espalda de Werner se introdujo por el otro parante.
Luego de esa acción, el equipo de Kudelka se abroqueló en torno a Marcos Díaz y se dejó arrear por un local tan limitado como enjundioso.
Visiblemente molesto por la postura de su rival, el cuadro capitalino soportó un empate que se caía por su propio peso.
Un puntapié en la cara de Cóccaro sobre Lomónaco le permitió a Arsenal nivelar el marcador con un remate del mismo delantero a la derecha de Díaz tras la sanción de la pena máxima.
Si bien la falta existió, el jugador de Arsenal se tiró tardíamente dando la sensación de una simulación un tanto descarada, aunque no puede negarse la imprudencia del delantero uruguayo en la maniobra.
En el complemento el anfitrión intensificó su búsqueda y mucho tuvieron que ver los cambios implementados por el técnico Madelón ya que los mismos le dieron renovados bríos a la estrategia original de su escuadra.
Sin reaccionar Huracán no fue más que testigo presencial de la levantada del conjunto de Sarandí que lo llevó a la segunda conquista apenas transcurrida la media hora de la etapa final.
Una cesión del recién ingresado Kruspzky a Alexander Díaz derivó en un exquisito taco de este último para vulnerar la valla del indefenso guardavallas huracanense.
Las respuestas que encontró en las sustituciones su colega de Arsenal no hallaron correlato en la bancada del «Globo» ya que Kudelka no pudo darle un imprescindible revulsivo al por demás parsimonioso andar de su equipo.
Ninguno de los cinco ingresados gravitaron además de llamar poderosamente la atención el prominente abdomen del veterano Toranzo, impropio de un jugador de alta competencia.
En síntesis, una victoria del «Arse» tan trabajada como justa, en desmedro de un «Globito» au