El Gobierno nacional pagará dos bonos de 9.000 pesos a trabajadores informales, de casas de familia y monotributistas, a cobrarse en mayo y junio, según precisó el Ministerio de Economía.
En tanto, a jubilados y pensionados que cobren hasta el equivalente a dos jubilaciones mínimas se les otorgará en mayo un bono de 12.000 pesos en un solo pago.
Esto complementa el bono anterior otorgado de 6.000 pesos y de esta manera se equipara con el bono que se otorga a trabajadores de 18.000 pesos.
Los monotributistas que accederán al beneficio son quienes operen en las categorías A y B.
En el caso de trabajadoras de casas particulares el Estado abonará dos cuotas de 9.000 pesos cada una en mayo y junio indistintamente si están o no registradas.
Los trabajadores que podrán cobrar el beneficio son aquellos comprendidos entre los 18 y 65 años.
Al comunicar las medidas, el ministro de Economía, Martín Guzmán, anunció: «En las próximas semanas estaremos convocando a todos los sectores para diseñar un mecanismo para tomar parte de la renta inesperada por efecto de la guerra».
«Lo que se plantea es una alícuota sobre un conjunto de empresas que tienen ganancias altas, pero esa es una condición necesaria, pero no suficiente», precisó el funcionario.
Guzmán indicó que afectará a empresas con ganancias «mayores a los 1.000 millones de pesos» y aclaró que «tan solo el 3,2 por ciento» de las empresas que operan en el país las obtuvieron.
El ministro aclaró que «si esa renta inesperada se vuelca a la inversión productiva, esa contribución será menor».
El anuncio no contempló que se hicieran preguntas por parte de la prensa, con lo cual no se pudo precisar el costo fiscal de las medidas adoptadas, ni obtener precisiones del universo de beneficiarios.
La única referencia es que Guzmán anticipó que al cierre del primer trimestre el déficit primario fue de 0,25 por ciento del PBI.