El juez federal Marcelo Martínez de Giorgi ordenó un peritaje sobre los cuadernos originales del ex chofer del Ministerio de Planificación Federal Oscar Centeno, los cuales dieron origen a la mega causa por supuestos pagos ilegales a empresarios y que tiene a la espera del juicio a la Vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner.
La causa es a raíz de la denuncia hecha por el empresario mendocino Armando Loson, imputado en la misma, quien aseguró que existen «gravísimas irregularidades» como ser «adulteraciones y tachaduras de nombres, lugares, direcciones y fechas» en esos textos.
El peritaje es sobre «los manuscritos que surgen atribuidos a Oscar Centeno obrantes a fs. 32/36 del legajo de arrepentido formado en la causa nro. 9608/2018 actualmente reservado ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 7».
Es que la causa está en juicio oral y público por la existencia de dichos cuadernos, con una gran cantidad de empresarios y funcionarios, entre quienes están la Vicepresidenta y la cúpula del ex ministerio de Planificación Federal.
Sobre los cuadernos, Centeno dijo que los tenía guardados, pero luego agregó que los había prendido fuego, mientras que los mismos aparecieron en 2019 y él había pedido tener acceso para ver si eran los originales.
La legitimidad de los cuadernos es algo sobre lo cual hicieron hincapié muchos de los acusados aunque para la Justicia luego avanzó prescindiendo de ello, pues en el expediente valoraron otras pruebas como ser la declaración de los arrepentidos, la prueba documental y el cruce de teléfonos, entre otras cosas.
Según un estudio privado realizado por la defensa de Loson sobre los cuadernos hay «más de 1.600 alteraciones del texto original: 1.373 sobre escritos y 195 correcciones con líquido corrector, a la vez que pudieron visualizarse 55 enmiendas o testados, entre otras anomalías».
Martínez de Giorgi ya convocó a declarar a esos peritos privados, pero también paralelamente ordenó el estudio oficial para saber «si los textos conformados en él pertenecen o no a un mismo puño escritural».
También «si se aprecian sobre escritos, testados, y cualquier tipo de adulteración y/o modificación del texto originalmente plasmado».
«Mediante los estudios cromatográficos, ópticos y lumínicos, se identifiquen si se han empleado uno o varios implementos escritores, estilos de tinta, informando su cualidad, cantidad y características de componentes», detalló.
Asimismo, le fija otros puntos de pericia a los expertos como saber si «utilizando las técnicas de rigor determinar si se observan lavados o borrados ya sea abrasivos o químicos».