El mediocampista de Independiente Lucas Romero volvió a jugar en la victoria por 3 a 0 sobre Colón de Santa Fe tras el fallecimiento de su padre, lo que aseguró que fue «el golpe más duro» que recibió en su vida, y le agradeció a sus compañeros por ayudarlo a atravesar el complejo momento.
«Fue un partido especial para mi después de fallecimiento de mi papá, que estaría cumpliendo 50 años. Soy valiente y sigo adelante, siempre me esforcé. Quiero agradecerle a mis compañeros, que estuvieron conmigo en un momento muy difícil de mi vida, hasta el día de hoy creo que fue el golpe más duro que he recibido», señaló Romero en declaraciones a TyC Sports.
Y añadió: «Me abrazaron, me contuvieron y me están ayudando a salir de este momento. Lo hago jugando al fútbol que es lo que más me gusta, me apasiona, lo que amo y lo que a mi viejo y a mi familia les hace muy feliz. Sigo trabajando y esforzándome para poder dar lo mejor para Independiente».
El «Perro» se había perdido el encuentro con Atlético Tucumán, por lo que durante la semana se volvió a poner a disposición del cuerpo técnico interino encabezado por Juan José Serrizuela.
«El martes me lo tomé para resolver unas cositas y el miércoles ya me presenté y transmití que quería estar, que me sumaba para poder ayudar y devolver un poco del cariño y del amor que me transmitieron mis compañeros en estos días tan complicados para mí», cerró el mediocampista.
