El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, acusó este miércoles a Rusia de violar los principios básicos de pertenencia a las Naciones Unidas al invadir Ucrania y dijo que Moscú está haciendo amenazas «irresponsables» de utilizar armas nucleares.
En su intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, Biden criticó al presidente ruso Vladimir Putin por iniciar una guerra no provocada. Unos 40 miembros de la ONU están ayudando a Ucrania con financiación y armas.
«Un miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas invadió a su vecino, intentó borrar del mapa a un Estado soberano. Rusia ha violado descaradamente los principios básicos de la Carta de las Naciones Unidas», expresó Biden.
Más temprano el miércoles, Putin ordenó una movilización de soldados para luchar en Ucrania e hizo una amenaza apenas velada de utilizar armas nucleares, en lo que la OTAN calificó como un acto «temerario» de desesperación ante una inminente derrota.
«Una guerra nuclear no se puede ganar y nunca se debe librar», comentó Biden.
El mandatario se esforzó por aclarar que nadie había amenazado a Rusia, a pesar de las afirmaciones de Putin en sentido contrario, y que Moscú había buscado el conflicto.
La Casa Blanca también anunció 2.900 millones de dólares de financiación adicional de los Estados Unidos para combatir la inseguridad alimentaria mundial, que se suman a los 6.900 millones de dólares ya comprometidos este año.
Estados Unidos ha reforzado su atención a la seguridad alimentaria desde que la invasión a Ucrania el 24 de febrero agravó una crisis alimentaria mundial. Rusia y Ucrania son los principales exportadores de cereales y fertilizantes y los envíos se vieron interrumpidos por la guerra.
Las Naciones Unidas indicaron que el conflicto empujó a otros 47 millones de personas al «hambre aguda».
«Este nuevo anuncio de 2.900 millones de dólares salvará vidas a través de intervenciones de emergencia e invertirá en asistencia de seguridad alimentaria a mediano y largo plazo para proteger a las poblaciones más vulnerables del mundo de la creciente crisis de seguridad alimentaria mundial», comunicó la Casa Blanca.