El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, aseguró hoy que a la provincia norteña «todavía no llegó la segunda ola» de casos de coronavirus y confirmó que dispuso «mantener las escuelas abiertas», al explicar que adoptará medidas cuando «llegue una situación compleja».
De este modo, el referente radical ratificó la continuidad del cronograma educativo con clases presenciales, sin adherir a la suspensión que anunció el presidente Alberto Fernández a partir del próximo lunes y hasta fin de mes en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en un intento de mitigar el aumento de la curva de contagios de coronavirus.
En diálogo con Esta Mañana, el programa que conduce Luis Majul por Radio Rivadavia, el ex senador nacional enfatizó que «la posición del Gobierno de Jujuy es mantener las escuelas abiertas».
Respecto al cierre focalizado dispuesto por Nación ante el crecimiento de la curva de contagios, el mandatario jujeño descartó implementar restricciones similares a la dispuestas por el Presidente y explicó: «Cuando llegue una situación compleja tomaremos medidas».
De todos modos, reconoció que «los bares y comercios no dan más», al plantear el alto impacto económico de las medidas en el sector gastronómico.
«Es muy difícil para quienes gobernamos y para el propio Presidente ver el crecimiento acelerado de la curva de contagios en la zona metropolitana como en otras provincias», afirmó.
Sobre la situación epidemiológica en la provincia norteña, el mandatario expresó: «En Jujuy estamos con un promedio de 70 casos de coronavirus por día. Todavía no llegó la segunda ola.
Por eso, la posición es mantener las escuelas abiertas y la mayor cantidad de actividades posibles».
E insistió: «Hay un brote más fuerte que el año pasado en el Área Metropolitana (de Buenos Aires), pero en Jujuy estamos bien».
«El año pasado en Jujuy no habíamos cerrado, pero la gente no circulaba, había mucho miedo. Sí vimos que se afectó mucho la economía», precisó Morales, tras indicar que 2020 fue «un aprendizaje para todos».
En ese sentido, Morales indicó: «La administración de la pandemia no ha sido perfecta para el Gobierno nacional ni para las provincias».