En un dardo hacia el sector de «las palomas» del PRO, el diputado nacional electo Ricardo López Murphy sostuvo hoy que la elección de Juntos por el Cambio en la Ciudad de Buenos Aires estuvo «por debajo de las expectativas» y tensó el clima interno al hablar de un «exceso de confianza» en una parte de la oposición.
Las declaraciones del «Bulldog» van en línea con lo que ya había expresado la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, exponente por excelencia del sector de «los halcones», quien había agitado la interna cuando dijo que Juntos por el Cambio tenía «una expectativa mayor» en la ciudad donde gobierna Horacio Rodríguez Larreta, quien en su momento había logrado imponer a María Eugenia Vidal como primera candidata por encima de ella. .
«La oposición ganó las elecciones. Ha hecho una elección extraordinaria en el interior del país, una elección buena en provincia de Buenos Aires y una elección que estuvo debajo de las expectativas en la Ciudad», comparó López Murphy en diálogo con FM Milenium, en referencia a los 47 votos cosechados por la lista que encabezó Vidal.
Inclusive, el economista liberal ponderó la labor del Frente de Todos entre las PASO y la elección general, donde exhibió una remontada en provincia de Buenos Aires.
«El oficialismo temía una derrota catastrófica e hizo dos cosas razonables: aprendió de la derrota de las PASO por no desparramarse y entendió que el mensaje era que tenía que ponerse a gobernar», aseguró.
Tras reconocer que le hubiera gustado «un resultado (electoral) más contundente», señaló que «a lo mejor hubo un exceso de confianza en algún espacio» de Juntos por el Cambio, «alguna sensación de exceso de confianza de que los resultados iban a ser muy positivos».
No obstante, luego suavizó sus comentarios, desdramatizando el escenario: «En vez de triunfar por diez puntos, la oposición triunfó por ocho y algo. No hay que rasgarse las vestiduras, es para aprender».
Consultado sobre el sinsabor que se vio en algunas caras del festejo en el búnker de Juntos por el Cambio en la noche del domingo electoral, el líder del espacio Republicanos dijo que por ejemplo él se sentía «con una sensación de luto» por el homicidio del kiosquero Roberto Sabo en Ramos Mejía.
El exministro de Economía de Fernando de la Rúa también se mostró disconforme con la línea y el tono que utilizó Juntos por el Cambio en la recta final de la campaña, ya que se continuó con la moderación y no se apostó a ir a buscar el voto de centroderecha.
«Hay mucha gente que creía que el énfasis debió estar a buscar ese voto y esa disputa, un voto que prefería un discurso más contundente y determinante. Quizás el énfasis tenía que ser más fuerte, no en mi caso. Debería haberse subido y cargado más», evaluó.
Sobre las razones que pudieron haber perjudicado a la lista liderada por Vidal, que tenía el objetivo de superar el 50%, identificó que parte del voto de centroderecha se fugó a la propuesta de Javier Milei.
«En la Ciudad hubo una fracción del voto de centroderecha que fue dividido y que si se hubiera unificado le hubiera dado un susto muy grande a María Eugenia», analizó.
En otro orden, pronosticó que la marcha del Gobierno en sus últimos dos años será «complicado» pero no tanto como parecía dado que el la coalición oficialista «no se desparramó» después de los resultados».
«La oposición tiene que concentrarse en un plan detallado, en la narrativa y en la gobernanza. Si hace esas tres cosas en 2023 tendrá tiempo de resolver la candidatura. Si empieza por la candidatura no va a resolver nada», recomendó López Murphy.
De todos modos, se mostró confiado y esperanzado en que Juntos por el Cambio logrará vencer en 2023 en primera vuelta.
«Hay dos grandes coaliciones que van a noquear en primera vuelta, no va a haber espacio para otra cosa, no hay espacio para un tercero en discordia. Se gana en la primera vuelta, entonces hay que tener mucho cuidado en lo que se hace. El que se equivoca, pierde. Porque va a ir a un simple nocaut, no va a ir a doble vuelta. La oposición está a dos puntos del 45, se va a ganar en primera vuelta por eso hay que hacer las cosas muy bien. El Gobierno no terminó desparramado, es otro juego el que viene», analizó.
Por otra parte, afirmó que «no le cree nada» al ministro de Economía, Martín Guzmán, cuando dice que no habrá devaluación porque, a su criterio, eso ya ocurrió.
«El mismo lunes dejaron de intervenir en el mercado libre y ahí devaluaron. Ellos no pueden anunciar que van a devaluar, pero en los hechos ya pasó y va a seguir pasando», analizó en referencia a la decisión del Banco Central de dejar de intervenir en los mercados del dólar «bolsa» (o MEP) y «contado con liquidación», lo que ocasionó una disparada de estos dólares «libres».